lunes, 20 de febrero de 2012

Y es que me da igual lo que piensen de mí, lo que puedas decir por ahí, que ya me importa una mierda. Siempre he sido de las que se preocupan por todo, por cualquier cosa insignificante. Temiendo a los comentarios de la gente, a las miradas por encima del hombro. ¿Qué pensarán de mí, qué dirán? Siempre con preguntas en la cabeza. Y es que estoy harta de siempre lo mismo porque aunque no lo parezca, puedo ser igual que todos ustedes o incluso mejor. Pueden decir lo que queráis de mí, de todos modos sé que seguirán hablando.. He aprendido que a lo largo de la vida siempre habrá alguien que te quiera hacer daño, que intente sacar los trapos sucios, contar mentiras y toda tu vida personal. Que a veces de los que más confías luego son unas lagartas y no hacen más que llamarte de todo a las espaldas. Pero ahora ya me da igual, ahora haré todo lo que no he hecho antes por miedo a hacer el ridículo. Si quiero pintarme el pelo de naranja, me lo pintaré. Puede que muchas veces vaya haciendo el ridículo pero eso es cosa mía, de nadie más. Creo que de los errores se aprende, sí, pero quiero aprender por mí misma. Quiero dejar algo claro y es que os pienso mandar lejos, bien lejos, a la mierda si me dejan a todas esas personas que no hacen más que juzgarme, que mirarme con una lupa. ¿No se dan cuenta de que son patéticos? Quiero hacer cosas prohibidas, quiero recorrer el mundo, quiero cometer locuras, quiero hacer cosas imposibles y lo más importante, quiero hacer lo que se me ocurra sin miedo a lo que digan los demás. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario